Camarero, hay un raton en mi sopa
Ayer, mientras cenábamos en un restaurante humilde, pero de mucho éxito, un lindo gatito se paseaba entre nuestras piernas orgulloso por la pieza que se había cobrado: un ratón que llevaba de acá para allá colgando de la boca. La cena se nos atraganto ligeramente...
1 comentario:
Bueno, no va a ser todo tan idílico. N, N y R.
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